Según Kike Calleja, un colaborador del programa español TardeAR, Shakira tenía un precio de venta de 17 millones de euros, lo que equivale a unos 18,6 millones de dólares. Aparentemente, encontró un comprador gracias a la intervención del cantante Marc Anthony.

La vivienda está situada en una exclusiva área de Miami Beach, hogar de celebridades como Julio Iglesias, Ricky Martin y Jennifer López. En su interior, la casa cuenta con un amplio salón adornado con mobiliario blanco, una extensa mesa de comedor de tonos neutros, un espacio de descanso con colchonetas, un salón destinado para fumar hookah, seis dormitorios, 7.5 baños, un gimnasio con grandes espejos, y una cocina de diseño blanco y madera equipada con una barra de desayuno, una mesa para comer, un sofá personalizado para la siesta y una vinoteca.

En cuanto a las instalaciones exteriores, la propiedad dispone de una terraza, jardines, una piscina con su correspondiente área de spa y un muelle con acceso directo a la Bahía de Biscayne.

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